Juego de pactos en Pozo Cañada

NOTICIA COPIADA DE LA TRIBUNA DE ALBACETE

Pozo Cañada es un pueblo de casi 3.000 almas en el que, en las recientes elecciones, la candidatura del PSOE obtuvo cinco concejales, con 763 votos, la del l PP obtuvo cuatro, con 713 y los independientes de ALPO (Alternativa Libre de Pozo Cañada) obtuvieron dos, con 319 sufragios.

Con semejantes resultados, podría parecer que los socialistas o los populares serían los que llevasen la voz cantante en las negociaciones para constituir una mayoría estable en el Consistorio del municipio más joven de toda la provincia. Pero nada más lejos de la realidad, porque la cabeza visible de ALPO es Pedro García, uno de los políticos más camaleónicos de la política provincial.

En el años 95, García era miembro del PSOEy alcalde pedáneo. Se marchó por primera vez de las filas socialistas porque, a su juicio, su partido no apoyaba la constitución de Pozo Cañada como municipio segregado de Albacete. En el 2000, volvió a la ‘casa común’ y ganó las elecciones de 2003 y 2007 como cabeza de lista del PSOE.
 

En 2011, el PSOE obtuvo de nuevo la confianza de los electores, pero un pacto entre el Partido Popular y una anterior formación independiente le apartó de la Alcaldía. En 2014, por diferencias  con la dirección del Partido Socialista en Albacete, rompió por segunda vez con él y creó ALPO, formación que lidera y con la que concurrió a las elecciones del  24 de mayo.
 

Ese mismo año,  durante una intervención en el Pleno municipal, García propuso a los demás concejales la firma un pacto de «regeneración democrática» por el que los grupos políticos se comprometiesen a que  gobernase la lista más votada, fuese la que fuese, porque «lo que  es un golpe de estado es que la minoría se imponga a la mayoría».

preacuerdo. Tras el 24-M, el PSOE fue la lista más votada, así que todo apuntaba a que los socialistas, como lista más votada, se haría con la Alcaldía, al menos a tenor de las declaraciones públicas de su anterior líder local.

Pero, el pasado día 9, la alcaldesa en funciones, Llanos Soria, en declaraciones a una emisora local, anunciaba un preacuerdo entre el PP y ALPO, por el que esta formación se hacía con dos concejalías -Sanidad y Parques y Jardines- y entraba, además, en la Junta de Gobierno de la Corporación municipal de Pozo Cañada. En dichas declaraciones, Soria manifestaba que el pacto se había fraguado «el jueves anterior -se refiere al día 4- y fue una reunión cordial, en la que se acordó que la concejalía de Sanidad iba para Francisco Prieto, y la de Parques y  Jardines la iba a ocupar él».
A las pocas horas, La Tribuna de Albacete se ponía en contacto con la alcaldesa, quien confirmó el pacto, pero se mostró bastante reservada y se remitió al propio Pedro García para hacer valoraciones sobre el pacto entre populares e independientes.

Desde entonces, este mismo diario ha intentado ponerse en contacto con García en repetidas ocasiones, sin lograr ningún resultado al cierre de esta edición.

La explicación a esta reserva por parte de los populares y al mutismo de ALPO se encontraría en las filas del partido más votado, el PSOE, que también habría abierto negociaciones con la formación de quien fue su cabeza visible durante años. Fuentes del PSOEconfirmaron que, en efecto, ha habido contactos entre los dos partidos, pero nada más; de hecho, su  actual líder, Francisco García, mantenía ayer una reserva total acerca de dichas negociaciones.

«De momento,  no puedo decirle nada acerca de este asunto, pero en el plazo de 24 horas -declaró ayer a La Tribuna- podré hacer las declaraciones que usted quiera sobre este particular».